Manifiesto 4.000 niñas y niños
4.000 niños son 10 colegios.
4.000 niños son 363 equipos de fútbol.
4.000 niños son 27 teatros infantiles llenos.
4.000 niños son todos los niños de Soria menores de once años.
4.000 niños es la población entera de Ajalvir.
4.000 niños es la población entera de Robledo de Chavela.
4.000 niños son Aldea del Fresno y Buitrago del Lozoya juntos.
4.000 niños es una línea recta de cadáveres pequeñitos desde Atocha hasta Nuevos Ministerios.
No es posible llegar a concebir lo que significa la muerte de un solo hijo. El dolor y la sensación de injusticia porque una vida por vivir sea arrancada de nuestros brazos. El dolor por la sonrisa infinita apagada. El recuerdo constante de unos ojos que no volverán a mirar un mundo que le pertenecía y le esperaba nuevo, a estrenar.
Tenemos ahora, no la idea real del dolor de las familias palestinas que ven morir niñas y niños uno tras otro, que cargan desesperados hijos inertes tratando de obrar quién sabe qué milagro. Lo que tenemos es un dolor constante en el corazón porque somos madres y padres. Dolor cuando besamos a nuestros hijos dormidos o cuando nos despedimos de ellos en el cole. 4.000 dolores pequeñitos y absolutos.
No puede ser. No debe ser. Y sobre todo, tiene que dejar de ser.
Los niños nunca son culpables.
Los niños siempre son inocentes.
No hay derecho, ni internacional ni ningún derecho, que ampare el asesinato de niños para lograr un fin. No hay fines mayores que preservar la vida de nuestras hijas e hijos.
Y los niños asesinados en Gaza son también nuestros. Porque los niños son de toda la humanidad. Porque todos los seres humanos tenemos la obligación de socorrer a la infancia, de ser las madres y los padres si las madres y los padres faltan.
No al genocidio en Gaza. No al asesinato de niños y niñas. No al asesinato de inocentes. Ni en Gaza, ni en ningún sitio. Ni ahora ni nunca.
Condenamos, y no parece descabellado condenar, la muerte como forma de hacer política. Matar no es humano porque matar es acabar con vidas humanas. Condenamos cualquier asesinato de personas inocentes y condenamos cualquier asesinato que se excuse tras la culpa. La muerte no puede ser una herramienta dentro de un estado de derecho. Ni en Israel ni en ninguna parte del mundo.
Pedimos, y no parece tanto pedir, respeto a los derechos humanos.
Las familias de Madrid mandamos nuestro amor a las más de 4.000 familias que han perdido a sus hijos en este ataque inhumano (porque no es humano matar niños). Nos unimos a su dolor, nos unimos a su sensación de injusticia infinita y les decimos: no en nuestro nombre. Nunca ese dolor en nuestro nombre. Estamos y estaremos con vosotras.
Alto el fuego ya. Alto el fuego siempre.
Comisión de Relaciones Exteriores
AFA CEIP LOPE DE VEGA
Hola! Somos del Afa del CEIP Manuel Nuñez de Arenas del Pozo, Puente de Vallecas. Nos sumamos a la convocatoria, gracias por la iniciativa. También otros coles del distrito como el Javier de Miguel se suman.
¡Bravo esas AFA comprometidas de Madrid!
Alto al genocidio en Gaza. Resolución dialogada ya. Garantizar los DDHH. Por la paz y la no violencia y el cumplimiento de la Resolución de la ONU y la legalidad internacional.